Limpiar y poner a punto el teclado
18 de abril de 2020
Después de utilizar el teclado de nuestra computadora durante años llega el momento de limpiarlo un poco, no porque nos guste la limpieza, sino porque puede empezar a funcionar mal, resulta más difícil escribir con velocidad y huele un poco a podrido.
Si eres como yo, que como delante del ordenador, el teclado puede contener secretos insospechados atrapados entre sus teclas. Así que lo mejor para limpiar el teclado del ordenador es quitarle las teclas para acceder a las zonas donde se queda atrapada la suciedad.
A todos los teclados se les pueden quitar las teclas, desde ordenadores de escritorio hasta a laptops. Algunas son más difíciles de quitar que otras. En este tutorial vamos a ver cómo se les quita las teclas a teclados de ordenador de escritorio, de tipo mecánico y de membrana. Pero si en tu caso quieres limpiar el de un portátil, busca el modelo en youtube, seguro que encuentras a álguien que ya lo ha hecho.
Para quitar las teclas hay herramientas especiales, pero no son tan necesarias. Lo único que necesitamos es una manera de atrapar la tecla desde abajo y tirar de ella uniformemente hacia arriba. Con un clip para papeles seguro que puedes improvisar una herramienta.
Si no hay espacio entre la tecla y la carcasa del teclado para poder meter un clip, podemos probar a intentar meter un trozo de plástico, como una púa de gitarra o una tarjeta de crédito, para intentar hacer palanca y conseguir extraer la tecla.
En nuestro caso las teclas están muy duras, cuesta mucho escribir con velocidad. Lo que vamos a hacer es aplicar un lubricante que se lleve bien con la electrónica para suavizar la pulsación.
Un aceite para máquinas de coser funciona bastante bien. En el vídeo lubricamos con aceite de silicona, que compré en amazon por no mucho dinero.
Lo que más pereza dar de limpiar el teclado es quitar y poner las teclas, pero podemos ponernos en una mañana tonta que no tengamos mucho que hacer. La verdad es que es bastante entretenido y la diferencia entre antes y después merece la pena.